domingo, agosto 27, 2006

jorge spíndola /poeta de barrio /trelew /chubut /patagonia /argentina















raúl mansilla, a.n. y jorge spíndola en trelew.

Poemas

ya lo sé

yo ya sé
lo que es el amor.

yo aprendí a beber vino
cuando trabajaba
en la pampa de salamanca
al borde de la ruta 3.

aprendí a beber callado
mirando las martinetas
que se iban siguiendo la alambrada.

de vez en cuando un camión
como un incendio perforaba la tarde
y pasaba
dejando un suspiro en las retinas
de los perros.

a lo lejos había
un molino negro
el viento agitaba sus pedazos

molino deshecho
sin aspas para el vuelo
chaperío sin alas
llorando en pozo de la noche.

yo bebí borracho en las alturas
a mi no me digan nada.

perdí una camisa
buscando ovejas en la nieve

perdí los sentidos
mareado en una torre
que se alzaba como un sueño
en la chatura de la estepa/
un mirador creo que era.

y ya sé lo que es el amor

(por las noches yo dormía
en un catre adentro de una casilla)

después de apagar el alumbrado
(un lister a todo culo)
desaté los perros
y me quedé bebiendo
con los ojos mezclados con la noche

con la piel hecha un silencio
como un solo cuerpo enmudecido por la pampa.

en la pieza brillaban
por la luna
las latas de aceite supermóvil multigrado/
el viento ladraba a la ventana.

el viento es un perro desgraciado
aullando en las orejas del insomnio.

los vehículos pasaban en la ruta
con ráfagas de luz en esa pieza.

y por eso
yo ya sé lo que es el amor

yo recé borracho el padrenuestro
para que
un auto con dardos veloces pasara iluminando
el cuerpo de thelma tixou
que brillaba en el almanaque
de aquella noche de aquel invierno
de esos años.

thelma estaba espléndida en esas soledades
tenía un vestido rojo
que ardía ante mi boca
cuando las luces
la encendían como llama en pleno vuelo.

yo ya sé lo que es la sangre
cuando arde como aceite en la penumbra.

el cuerpo de ella era un planeta
girando en el abismo
y yo su único habitante/
me ataca como una sed cada vez que me acuerdo de esa diosa.

el amor es como apretar una foto de thelma tixou
en la garganta de la noche/
o el amor es otra cosa
animal que se espanta
que vuela lejos
y uno
no ha tenido el gusto.


los dos zapatos en el aire

una mía amiga dice
que es difícil ser poeta
que es un peligro andar
mostrando las costillas por la calle
o en un libro
yo le digo que no que no es difícil
más jodido es ser acróbata
o albañil en las alturas

no es difícil escribir
lo difícil es no caerse para arriba
o para abajo

que eso fue lo que le pasó al finado justo cárdenas
por ejemplo él llegaba en pedo a la obra
y se ponía a revocar con un pie afuera del andamio
hacía equilibrio
y un día se ve que se olvidó
y apoyó los dos zapatos en el aire

el resto ya se sabe
justo está enterrado a dos metros bajo tierra
y sus hijas dicen que justo está en el cielo

no es difícil ser poeta

(yo escribo palabras al borde del andamio)


lisboa

nunca estuve en Lisboa

siempre acá,
metido en este cuerpo,
atado al páramo o abrazado
al mar y sus acantilados

siempre los mismos ojos
con cuchillos naranjas en la tarde,
siempre acá

nunca caminé por las calles de Lisboa
siempre pampa seca
y autos abandonados al borde de la ruta

ahora mismo me invade la imagen de un colectivo
detenido para siempre
oxidándose con yuyos en su cuerpo,
un bedford verde agua
con teros lejanos en su lomo

nunca puedo abrir esa cortina
que envuelve la existencia
esa cortina agitada por el viento
que anda como gasa
cayéndose sobre mi cuerpo

siempre acá,
entregado como un perro a este paisaje,
oliendo matas, salpicado de escarcha
para siempre

lisboa crece por mi boca en esta noche
mientras orino abrazado al álamo de casa
mientras pasan autos en la ruta
mientras llueve y crece el perfume de la tierra
mientras nada se parece a lisboa
y sólo un gato
camina en los paredones de mi calle

lisboa qué lugar extraño
navegando en mis entrañas
lisboa tantas cosas
tantas noches navegando
al sur de toda mi existencia


viernes, agosto 25, 2006

paula yende /poeta - vicepresidenta del club de la canasta /junín /buenos aires /argentina




Poemas


1


y si te cantan los pájaros de adentro
después una tormenta
no será tan negra
siempre verde llorón
bailarás en la cordillera de los días tristes
canciones para príncipes tontos
que ven pasar las carrozas del amor
hechas fuego
y entenderás por qué las niñas desoladas
no limpian el jardín
y las flores nacen igual como hormigueos en la ciénaga
con botellas de penas de vidrio
recostarás recuerdos en parvas de hojas secas
y cuerpos tibios
esperarán que algún atardecer
pase algo más que la noche
habrán aprendido entonces
a dejarse abandonar dentro de sí mismos
como un hongo de humedad
cruel pero bello


2


ciertos cielos desnudos
ahogan los pies
y desde entonces el aire te pertenece
sos un hilo a dos centímetros de la tierra
no es la tv
los astros del tierno amor
ni el vicio de li po encarnádote
una especie de extravismo iluso
algo insensato para un ojo educado
una hoja en el varieté de parque
o alguna gota demás caída
no son los dolores de hambre
la fiel exposición del alma
ni la tristeza ofreciéndote su cuerpo
suspiro
un susurro
sensiblemente
inútil


poema del triste pan duro


deja deshacerte en las encías
el melancólico magullo de la coca
entre dientes marrón de otoño sucio
amargo y suburbano sueña serge
que chet baker le sopla los versos
desde el night club hasta su walk-man
llueve fino quejumbroso la lluvia siempre da sed
de casa calor sin t.v vaso lleno de pensar
penando el poema como el pan de ayer
verde que te quiero verde lorca es un poeta
de new york de aquí de allá como todo triste
invierte el orden cree en la revolución de la neurona
santifica las rutas marea bares en bicicleta hasta el día
en que se hace alma de farinha azúcar impalpable
esos días donde hace cola habla poco y la humanidad gris
no percibe la alteración de los yuyos bajos del fondo
de los ojos una dureza de pan brillante acostumbra
cruzar la vía el círculo de tristeza que dejan los circos
que desaparece y aparece melancolía y poco dinero
dicen ser tanto´s cuesta uno y lo otro de cualquier modo
o moda del infeliz que se siente satisfecho en un corte de luz
general por suerte no aprendimos la ceguera sino el tacto
de volver solo al caos del universo interno o externo
fuimos amasados entre bollos de agua manos que no escribieron
de ignorancia la tristeza la locura de dios es el amor
la panza de miga de pan de hermeto el piano de chopin
prevert tus palabras en la cama la dureza de las noches frías
cáscaras de cangrejo entre sábanas como telones del corazón
canta chavela dura de arrugas no más de pura terquedad vive
todos nos vamos y desaparecemos al pan duro lo rallaron
y la tristeza la tristeza aúlla en un poema ginsberg
y es una estela en la voz de elis
y se anida en la piel como un crepúsculo te amanece te deambula
la duda en copas pequeñas te sopla un susurro un guiño una ampolla
en un dedo puede volver el camino largo un tren de retiro
hasta la bahía entre las sierras el morro una ventana
un campo amarillo es cuántos vincent o andy desde la plataforma
marítima es la tristeza naufragados
en un poema la botella de vino es una meada de palabras
esto no es poesía poesía tengo una cascada en el inodoro un agujero infinito en el bidet
duchamps estaría orgulloso de no cobrar entrada en los museos y de que borges no haya sido feliz
porqué él debería haberlo sido siempre pregunto
hasta cuando va a doler crecer de noche
mudarme usar la cabeza de meduza cruzar el río en una cáscara de nuez
con las velas a media asta sopla que te sopla el viento sudaca
patágonico como novelli poeta del hastío
trejo pessoa boudelaire ellas pizarnik cristina césar la campazzo
y patty & violeta en el hastío reaccionario habitan como un recuerdo
de a ratos al alzheimer le huyen
corremos tras la pérdida aun sabiendo que es una perdida
siempre enamoró la turra en algo el morbo del cine en las tetas
la teta que te mamó aquella angustia oral se convirtió en poema
y así hasta la multiplicación de los panes de los peces penes en las vaginas de las vírgenes del mar
algas duras caracolas desintegradas de la nada y el ave del himen que no dice amen
iglesias dejad de maquillarse el sufrir es otra cosa no es buen matrimonio hombre & poder
ay si pudiera decir tuyo mío tus mi plurales y no endurecer tanto el nosotros
triste yo el artista singular multifacético solista de él mundo ombligo
lingüístas estrangúlense con la lengua en los tobillos de bukowski
poetas manifestarse en la bebida así como en todo desorden de la vida
mandalas podríamos ver en las pinturas artesanos el corazón de las maderas los metales
el barro en los ladrillos de las manos del obrero al grafito al maquillaje del actor
músicos pide caricias tímidas el instrumento el pulso da una pasión en las pestañas
instankarmas
un segundo de cada día absolutamente todos estamos duros como pan de poema
de ayer sonriendo tristemente hasta mañana



empate


casi siempre

la tristeza se junta
y esconde como una meada detrás de los arboles
cierto placer nocturno
empate digo
felicidad pestañea
y se derrama
con el vino en el mantel
hasta el más desequilibrado
hace equilibrio
morir o nacer
es cosa natural
invierno es un tango
verano es amor
y paz no es nada
hoy
en el mundo
el arte de la pérdida
justifica
con piedades electrónicas
al empate humano
por la suerte del mono
o la virtualidad de dios
el vino es real
profunda la piel
de los labios que permiten el roce
al vaso o al beso del lenguaje fino
le debo esta melancolía
como dos botellas de vino a cristihan
que cerca está a la vuelta
de la vida al poema
empate




...soplar espanta la tristeza
rigazio


nunca vi algo más triste
el viento soplando dos pueblos
espantados por un río
nosotros cruzando
de viedma a cármen de patagónes
nunca vi melancolía tan grande
el paredón de las almas
un vaivén ilusorio
nosotros bebidos
exaltando a li po
seres desamparados
no sé que espejismo provoca la luna de agua
no sé del haz de luz que los mueve
felizmente nunca estuve tan triste



esto


tenemos telas de araña
ojos de buey malherido
parsimonia milenaria para crecer
ver en la verdad
mezcla oculta de tristeza y verborragia
arrojamos la piedra
nos lavamos en el mismo río del naufragio
otras las aguas que hoy lo mueven?
somos siempre el barco
llevamos el revólver del suicida
la palabra prohibida del poeta
la voz quebrada
en la fuerza de una vela
el sub existir
andamos descalzos
con pan en las encías en la noche
la boca entera
el cinturón de orión mal prendido
esquivando calendarios
oficinas del orden impúdico
donde establecen las jugadas
estamos en los bares
las plazas desnudas
en los ojos del perro callejero
temblamos desde la luz
el espíritu
hasta la carne del otro
lo que quede por nacer
partirá
hasta el hartazgo
entonces



andy bohoslavsky /poeta minimalista /en un barco en el mar del norte
________________
No hay foto del poeta
se duda de su existencia
____________________

Poemas

Paré la guerra

Te va a parecer increíble
pero paré la guerra
estaba trabajando en el desierto
cuando vi pasar un tomahawk
y quise ver la hora
como el reloj se había detenido
tiré la palanquita hacia fuera
giré las agujas para atrás
al principio el misil se detuvo
luego comenzó a retroceder por donde había venido
sopló un viento fuerte
y aparecí de la mano de mamá
en la puerta de la escuela siete
era 1972
tenía mi viejo portafolio y un mantecol chico
me dio un beso, entré corriendo
saqué el cuaderno de geografía
tenía los deberes hechos
el mapa del Golfo Pérsico
me saqué un sobresaliente
le conté a la maestra la historia de los Persas, los Otomanos
los Árabes
sonó el timbre
pensé que papá tal vez venía a buscarme
nunca llegó
y me puse a llorar
como ahora en el desierto.



I

Algunas personas dicen
que para escribir poesía
antes se debe leer a
Verlaine
Valéry
Eluard
Apollinaire
Musset
Pound
Racine
Goethe
Keats
Shelley
Gautier
Joyce
Blake
Poe
Eliot
Mallarmé
Shakespeare
Bretch
Celine
Proust
Victor Hugo
Dante
Whitman
Prevert
Yeats
tal vez tengan razón.
Pero no me alcanzaría la eternidad
entonces prefiero arrancar
poesía
de los locos
marginales
suicidas
explotados
débiles
enfermos
místicos
de los que están en el borde
como mi amigo Vladimir
que escribe en su cama de hospital.
Caminamos sobre nosotros mismos
buscando
el
absoluto
viajeros de lo eterno.
La señora que limpia la pieza
pintura china del espíritu del Tao
progresos en el camino del zen
me dice mirándolo
partir:
es una lástima
tan joven
y pienso que tal vez
necesitemos muchas vidas
para comprenderlo.
Lo profano es sagrado
no lo había percibido
antes.
Entumecimiento espiritual
me someto sin reparos
a la dirección del mío
por eso me gustan las líneas
de Baudelaire
incomprendido
viejo Charles.
Nuevamente al principio
examinemos el problema
ellos tienen el dinero
y nosotros la poesía.
Le pregunto si no estará pensando en
plazos fijos
se ríe y me alegro.
Sergio viene con unas cervezas
trae cosas de Rimbaud
habla de Buda
de George Harrison
de Bukowski
de la Beat Generation
la flecha de un arquero
zen
sus palabras suenan bien.
Vladimir se durmió
mi amigo lee
Una temporada en el infierno.
En la televisión
un volcán estalla en África
los parlantes avisan
que terminó el horario
de visitas.
Satori
irrupción súbita de la luz
en la conciencia
le digo a Sergio.
Me dice que estoy loco
y nos cagamos de
risa.



Un poeta

Si me preguntás
qué es un poeta sinceramente no sé la respuesta
pero quiero hacer un esfuerzo
decirte algo, aunque sea incompleto
y aparece un lugar, una pradera
en la pradera una casa y un molino
en la casa un viejo con ropa destrozada
libros tirados, perros que ladran
canillas que gotean, ventanas rotas
tapadas con cartón
unas hojas sobre el piso
el sillón que mas me gusta
ahí estoy sentado
mirándote
preguntándome que hice con mi vida.




jueves, agosto 24, 2006

sergio rigazio /poeta beatnik/junín /buenos aires /argentina
























Poemas



Oración a Neal Cassady


protégenos San Neal de la muerte
y espanta la muerte del camino

con polvo de tus huesos de risa
apuntando hacia el oeste ilumina
las señales
las ventanitas temblorosas
lo que vemos languidecer
a un costado de las rutas

refuerza las sandalias del pecador
y de los hombres sin fe
refuerza los frenos de los malos conductores
y los elásticos de las camas en las pensiones baratas

protégenos de las falsas alarmas
del cielo
de los distraídos
y de la luz mala de los patrulleros

sálvanos del tiempo que se pierde
de los que perdieron los códigos de las carreteras
y de los filibusteros
y las cabinas de peaje

cobija nuestras almas bajo la inmensidad
de las nebulosas
pasando a través de la noche
con ojos sacramentales
rumbo a lugares tan extraños como
Capilla del Monte
Bragado
o Membrillares

cobija los corazones de nuestros amores perdidos
y de los dulces enamoramientos imposibles
y cántales las canciones de Chet Baker
para que no sufran

déjalos pasar
déjalos volver
y que no cuenten los kilómetros
ni vean fantasmas en el espejo retrovisor

protégenos San Neal de la muerte
y espanta la muerte del camino



after cus-cus
(cantata electrónica del aire)


todos los hombres que besan cariñosamente a sus esposas
y acarician las cabezas de sus hijos dormidos en la noche
y los acompañan hasta el jardín de infantes
todos

los que bendicen el sueño del prójimo
y tienen buenos pensamientos acerca de cómo comportarse
así en la tierra como en el cielo

los que cumplen sus deberes y satisfacen
cientos de responsabilidades atrozmente humanas
y lo que implica moverse en un medio
a todas luces hostil para cualquier especie que se precie
de su sensatez

los que llegan a la meta sin perder el balero
y logran sus objetivos con una sonrisa
y sin demasiados remordimientos a la vista

los que aman exactamente hasta donde tienen que amar
y ya no sufren por lo que no amarán porque amar es divino
y a nadie se le ocurriría quedarse con el vuelto

esos hombres que entonan himnos de libre expendio
y son eficaces en el cálculo
justos en sus juicios
castos con sus jugos
y ocupan posiciones
más o menos estratégicas
bajo los parámetros propios del uso discreto del Poder
y otras precisiones con las cuales cualquier cristiano
con fe puede ver más allá de sus narices
aún sin ver nada

todos llegan a veces a la verdad y al bronce de una plaza
y al sobretodo de piel de camello y a vehículos todo terreno
y la TV satelital en medio del country y el sueño de los cisnes
vigilado por sofisticados monitores en casetas de seguridad
cada quinientos metros

todos dicen alguna vez oh Dios qué hemos hecho
y muchísimas veces oh Dios gracias y cuánto te quiero
y sí juro merecer la gloria y honrar la bandera
y ahuyentar a las zorras que se roban las uvas
o incendian los placares

esos que ceden sus asientos a las ancianitas
y las embarazadas y ayudan a cruzar a los ciegos
y consuelan en los funerales y dan palmadas en el hombro
y exclaman
¡adelante!
¡ve por ello!
¡triunfa!
¡feliz domingo!
¡ráscate el higo pero sé moderado!

los que producen envasan reparten empaquetan
colaboran contienen acarician sostienen acumulan venden
compran regalan o esconden cosas bajo el sol y pese a todo
duermen felices aún en las noches del horror natural
e insólitas reminiscencias del cerebro cromagnon
rebotando ad eternum en una minúscula porción del cerebelo

todos absolutamente todos pasan por la vida gestionando
y pontificando y peticionando y celebrando y brindando y brincando
y rezando ante toda clase de autoridades funcionarios profesionales
eclesiásticos y shamanes empecinados en la posibilidad cierta de
ser felices alguna vez

cueste lo que cueste están dispuestos a realizar
alguna clase de ceremonia vudú o sacrificio penitencial
o retiro del orgasmo o cláustrico encierro
o peregrinaje místico o ascensión a los cerros
o histérica flagelación de los sentidos

quieren ser buena gente abnegados esposos grandes
contribuyentes marajás domadores de circos héroes por un día
y algunos lo logran y salen en los diarios y opinan en las radios
y son buenos ciudadanos y gentiles caballeros que nunca piensan feo
y pescan patitos en las kermeses y ganan en la ruleta y pasean
a sus nietos y fundan clubes o sociedades de fomento y presiden
cooperadoras escolares o grupos de apoyo en las prisiones
y las parroquias

todos sin excepciones con o sin guirnaldas
y condecoraciones y diplomas o certificados de buena conducta
y medallas milagrosas y trofeos y altares mejor o peor vestidos
todos bien remunerados limpios prácticos ganadores
o aún pasando desapercibidos en medio de historias siempre ajenas

todos
blancos negros rojos amarillos morados con flores
escarapelas en el pecho
o la raíz de un jacarandá asomándosele
entre los dientes
demacrados apoliyados embalsamados
o inevitablemente convertidos en harina de huesos
todos tienen reservado un insoportable fragmento de nada
flotando en el vacío
y eso es lo que esconden a lo largo de este largo
largo paseo


aguafiestas
para Paulova


una noche ella vio caer una estrella y dijo algo acerca
de la posibilidad de creer que las cosas no eran como eran

que no era puro rocío lo que tenía en la punta de los zapatos
sino una especie de miel

una sustancia casi eléctrica que se desprendía del cielo
cuando alguien veía caer una estrella

realmente ella podía creer en eso
yo también

nos quedamos un rato así
mirando si volvía a suceder
algo
algún fenómeno extraño

no había necesidad de medir ni comparar distancias
lo que demora un objeto a veces animado
en desplomarse

no sé por qué se me ocurrió
creo que hacía mucho frío
sólo dije que siempre había estrellas cayéndose

sos un aguafiestas
me dijo
y volvimos a la casa


planeta de los simios


monos
monos
aterciopelados
carne de cañón
montañas de carne de monos
rugosos
llenos de pelos de monos
ardiendo
ajetreados
volviéndose
más monos que nunca
colgados de palmeras generosas
pero no por eso
menos monos
graciosos
crucificados de una u otra forma
bajo la ley de la jungla
monos felices
llenos de hidratos de carbono
piojos
ordenanzas
talco del laboratorio de Dios
monos por duplicado
hablando como gansos
dormidos como marmotas
monocelulares haciendo bip bip bip
monos rústicos
apergaminados
cibermonos en celo
manadas de monos
más o menos relajados como monos
una banana una fiesta
monos electrodomésticos
esperando que llegue la aurora
la felicidad
más cuotas
más bananas
monos cromagnon
monos de versache
oliendo
comiendo
cogiendo
rascándose como monos
pero sin entender lo que dicen los monos

aldo luis novelli /poeta a gatas /neuquén/patagonia/argentina











Estúpidos mirones de televisión


Yo soy el tipo

Yo soy el tipo/ el bebedor de cerveza.

El que vació revólveres
en latas de cerveza
en medio del desierto.

El que se bebió las cervezas
y escribió poemas alcoholizados
en el oxidado pellejo de la arcilla.

Yo soy el tipo que atravesó el desierto
detrás de un luminoso oasis
y cuando lo alcanzó/ se encegueció de espejismos.

El que abandonó el desierto
cuando el viento desparramó poemas
con olor a cerveza
y se vino a la ciudad.

Yo soy el bebedor de cerveza
el que navegó en barcas de cristal
cuando todos reían a carcajadas
bebiendo blancas bebidas en lujosas habitaciones.

El que cantó la canción del infinito
en un bar miserable del bajo de esta ciudad/
donde los bebedores de birra
se tiran en la vereda con una bolsa en la cara
a viajar por los bordes del paraíso.

Yo soy el que se acostó con dos minas una noche
y se despertó solo y sediento
a beber una cerveza
entre bardas rojas de un desierto amarillo.

Yo soy el tipo cansado de este mundo viejo
de hipocresía y usura/
el perseguidor de una palabra luminosa
que cure las llagas de infelices y hambrientos.

Yo soy el bebedor de cerveza
el que intenta la salvación o el desesperado perdón
escribiendo sucios poemas
plagiados a otros poetastros y poetitas
en medio de esta ciudad de tristes corazones.

El poeta in-mundo peleando en este mundo
de absurdas razones para la miseria/
vate urbano o lenguaraz de baratija
esparciendo bagatela poética
a ingenuas mujercitas que lagrimean de emoción.

Yo soy el que conoce el sabor de su sangre
desde el día que nació/
y mi garganta conoce la sed
antes que el sabor de una mujer.

El que se junta con bardos y borrachos
en bares pringosos y escucha su alcohólica musa
y hace que les cree y se emociona
al menos por un rato/
el tiempo necesario para fingirme poeta
y tomarles una cerveza.

Yo soy el que vio a Dios convertido en francotirador
disparando sobre la cabeza de los creyentes
desde la azotea de un bar en medio de la ruta.

Yo soy el tipo que gritó revolución
en medio de unos cuantos hijos de puta
que honraron a la patria
silenciando la palabra de hombres y mujeres
a punta de fuego y sangre mutilada.
(perdón 30.000 voces desaparecidas).

Yo soy el tipo/ el bebedor de cerveza.



En el bar de la esquina

El otro día estaba en el bar de la esquina tomando una cerveza
mientras veía por enésima maravillosa vez
el gol de Maradona a los ingleses/
entonces en la mesa de al lado
alguien dijo:
- miralo a ese negro villero la guita que hizo -
- y que querés/ hay que ser bruto y pegarle a una pelota para
triunfar
- y encima se floreó por el mundo con la camiseta del Che/ que vergüenza! -
- otro hijo de puta ese desgraciado/ menos mal que lo liquidaron -
- deberían volver los milicos - dijo otro
- si así revientan a este negro drogón/ como reventaron a los terroristas -
- sí/ hay que matarlo/ así no habla más -.

Yo tragué el sorbo de cerveza más caliente que haya tomado en mi vida
y miré preocupado hacia el costado
pensé que había descubierto una confabulación terrorista-musulmana
o a un grupo de mercenarios despiadados preparando un asesinato
en el viejo bar de mi barrio
pero me equivoqué.

Eran cuatro señores muy elegantes de saco y corbata
con autos caros y alarmas que espantan a los que se acercan
tomando café en el bar prohibido de mi infancia.
Eran cuatro típicos burgueses argentinos
esos respetados hombres de bien
integrantes de la maravillosa clase media argentina/
ésa que nos ha diferenciado siempre/ del resto de Latinoamérica.
Eran cuatro señores con cara de tipos preocupados
por los graves problemas del país
arreglando los males de nuestro pueblo.

Muchachos/ esto no es un poema/ ni mucho menos
esto es un grito de alarma
en el querido bar de mi barrio
hay cuatro tipos
preparando un magnicidio.




No puedo

a Dante Sepúlveda y Álvaro Urrutia

No puedo escribir/ no puedo
y me duele el alma
me duele el alma desde la tapa de los sesos hasta los huevos
es que no puedo escribir/ no puedo
y se me parte la cabeza y los ojos me arden
me arden tanto que no aguanto más
y con un cuchillo de cocina
me arranco el derecho como si fuera una bolita de vidrio blanda
como los relojes de Dalí y las mujeres de Picasso
como las babas del diablo que caen por mi boca
cuando no puedo escribir/ no puedo/ no puedo.

Y entonces me vuelvo loco
voy corriendo y saco la guita debajo del colchón
llamo a mis amigos y les pido plata
le robo los ahorros a mi vieja
y salgo decidido a comprarme una AK47 o una Magnum 44/
paso por la iglesia y pido perdón
negocio mi futuro cielo/
me cubro el hueco donde estaba el ojo con un parche negro
y me voy a Mc Donalds
y les grito donde están las hamburguesas de cartón y mierda que matan pibes
¡¡hijos de puta!! ¿dónde están?
y empiezo a disparar como un desquiciado contra el payaso Roland
y lo dejo perforado de lado a lado convertido en un guiñapo sanguinolento
contra un cartel de una hamburguesa gigante y jugosa/
mientras los estúpidos mirones de televisión tragan apurados
una Mc Nífica de doble queso y mierda picada.

No puedo escribir/ no puedo
y les digo ahora a ustedes:
es mejor que abandonen esas hamburguesas que están tragando
que apaguen el televisor
y se acerquen a sus hijos/ amigos/ hermanos o vecinos
y les pregunten dulcemente:
“que te pasa querido
acá estoy para escucharte
¿decime por favor/
que vas a hacer con esa metralleta checa de vacío
con una frecuencia de disparo de 600 balas por minuto
que tenés escondida debajo de la cama?”.

Salvador green

Desde hoy voy a darle un sentido a mi vida/
dejaré de beber como un desahuciado
de fumar como un escritor solitario
y de fornicar como un animal en celo.

Voy a cambiar radicalmente mi vida.
Ya basta de orgías desenfrenadas con mujeres sin fe
de apostar a la muerte en cada golpe de dados
de beberme el alba en alcoholes baratos
entre borrachos y poetas fantasiosos.
Me quitaré de la cabeza la idea de que el progreso fue un fracaso
de que el mundo es un deshecho de esta ambición sin fin
y que la llamada especie humana/ ha desaparecido definitivamente.
Dejaré de escribir papeles inútiles que nadie lee
intentando ganarme no se que cielo prometido/
el cielo está contaminado de misiles nucleares
y los ángeles murieron carcomidos por la radiación.

Ya no buscaré flores en el desierto
para dárselas a ellas como ofrenda de amor.

Voy a darle un vuelco a mi vida.
Me afiliaré a los buenos de Green Peace
formaré una fundación con artistas y deportistas
preocupados por los animales/
y me dedicaré enteramente a salvar al peludo patagónico
de las garras de los charanguistas.
Si bien aún no es una especie en extinción
pero si seguimos así/ pronto lo será
el folklore los exterminara dentro de poco tiempo/
hasta usarán al quirquincho bola para jugar al fútbol playero.
¡No quiero ver ese día!

Seguirán muriendo de hambre niños en Bangladesh/ Tucumán o Etiopía
continuarán muriendo mujeres y hombres del tercer mundo
de enfermedades curables en el primer mundo/
pero sepan ustedes una cosa
cuando desaparezcan los últimos sobrevivientes
el peludo patagónico estará vivito y coleando
y será gracias a mí
el salvador green de la patagonia.